La utilidad de los recubrimientos metálicos en Toledo es la de proteger piezas metálicas de la corrosión y del desgaste. También se utiliza para mejorar el aspecto estético y decorativo de algunos elementos, especialmente cuando están expuestos a la intemperie, como vallas de decoraciones metálicas.
Los elementos metálicos están expuestos a la acción del clima o del medio ambiente, por lo que pueden degradarse y sufrir corrosión y oxidación. Cuando se trata de piezas metálicas industriales para maquinarias o para la industria automotriz, las piezas se ven expuestas al desgaste por el uso, el roce y la presión. En todos estos casos, el uso de los recubrimientos metálicos en Toledo es fundamental.
El recubrimiento metálico por inmersión consiste es sumergir las piezas metálicas en otro metal fundido a menor punto de fusión, cuyas propiedades puedan fortalecer y proteger a la pieza original. Las aplicaciones más comunes de este procedimiento es el recubrimiento de chapas, barras, alambres y otros objetos con zinc, mientras que el acero, cobre y latón se recubren con estaño. En el caso del aluminio, se efectúa dicho recubrimiento en una atmósfera de estaño.
Existen otros sistemas para aplicar recubrimientos metálicos. En la cementación se calienta a altas temperaturas el metal a recubrir mientras está rodeado por el otro metal, el recubrimiento, que se encuentra en polvo. Así, este se funde en una capa o película protectora. Es el método utilizado para aplicar el acero otros metales como el cromo, cobalto y titanio, entre otros.
La laminación consiste en, como su nombre indica, laminar los lingotes de dos metales unidos. La presión ejercida en este caso es la que provoca la aleación y adherencia de ambos, creando láminas que, por separado, no tienen las mismas propiedades.
Desde Recubrimientos CG conocemos la importancia del proceso de recubrimientos metálicos y recomendamos su utilización y aplicación a diversos sectores de la industria.